La tienda de abarrotes fue construida en una ubicación estratégica que los grupos de delincuentes han sabido aprovechar para el narcomenudeo, el robo de vehículos y autopartes principalmente.
A decir de las víctimas, es el propio estacionamiento de la tienda el que los ladrones aprovechan para cometer sus atracos de autopartes presuntamente coludidos con los «viene viene», un cáncer que se ha extendido prácticamente por todo el municipio incluidas sus once juntas auxiliares.
Este medio informativo realizó algunas investigaciones y por lo menos 11 casos de robo de vehículos y autopartes se han registrado en plena luz del día y desde las entrañas del estacionamiento y periferia de la citada tienda, atracos de los cuales la empresa se ha deslindado totalmente, es decir no te brinda las garantías de poder acudir a realizar tus compras de manera segura.
A decir de las víctimas el interponer una denuncia los revictimiza al tener que enfrentarse a un tema sumamente burocrático y engorroso en donde los honorarios de un abogado, gastos de papeleo, el tiempo y la indiferencia de las autoridades se convierten en un problema mayor.
La localización geográfica de la sucursal y la falta de vigilancia policiaca permite que los delincuentes logren escapar con mayor prontitud incorporándose a vías alternas como la carretera federal México-Puebla, que puedan internarse en comunidades como San Lucas Atoyatenco, San Baltazar Temaxcalac y Santa María Moyotzingo, poblaciones con altos índices delictivos y también con el mayor número de bandas delicuenciales, otra ruta de escape es la carretera federal México-Puebla, con dirección al municipio de Huejotzingo.
El narcomenudeo, el robo de vehículos y autopartes se ha extendido de manera desmedida a colonias como el Ojo de Agua, La Purisima, Los Dicios entre otras incluso el centro de la ciudad en donde se reportan por lo menos dos robos con violencia diarios.
Se sabe que incluso las autopartes que son robadas terminan vendidas en el «fierro por kilo», en los bazares o en el propio tianguis de la ciudad, los vehículos que son robados también son utilizados para cometer otros crimenes después son abandonados, desvalijados, u ofertados en páginas de internet o peor aún, son utilizados para cometer secuestros y otros delitos de mayor trascendencia.
Mientras tanto la tienda de abarrotes no brinda las garantías y aunque a decir del gobierno municipal existen algunas cámaras de video vigilancia hasta el momento no se ha podido o simplemente no se ha querido hacer algo al respecto y son los vehículos y motocicletas de modelos recientes el principal objetivo de un grupo de delincuentes que con pistola en mano y a bordo de motocicletas se han dedicado a asaltar y a convertir la zona en guarida de criminales.
Por José Manuel Trinidad Corona/ Piwi